No sé desde que momento me perdí,
camine sin sentido hacia adelante,
siempre hacia adelante.
Mirando ciegamente dentro
de los ojos de los otros.
Ajena a todas las miradas curiosas,
huyendo de las manos temblorosas;
ansiosas por palpar un poco de mi calor.
Negando exteriormente
para morir por dentro.
Siempre sonriente
con la sonrisa forzada.
Fuerte como un León
frágil como una flor.
Caminando de pueblo en pueblo
de zapatos y tenis
de falda y pantalones
de negro y azul.
Arañada, mordida
despedazada.
Incompleta e inconsciente.
sangrada y abandonada.
Cantando a los amores
cantando a los corazones
cantando a los fantasmas
cantándote a ti.
Caminando por dentro
sintiendo y gritando
escondiéndome del amor
persiguiendo al dolor.
Y ahora ... Nada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario